Salma Hayek es una de las figuras más emblemáticas y exitosas de la industria cinematográfica global. Su camino hacia la fama y la riqueza ha sido uno de perseverancia y esfuerzo, desde sus humildes inicios en México hasta convertirse en una de las actrices más influyentes y adineradas de Hollywood. En 2025, su patrimonio neto se estima en unos 200 millones de dólares, lo que la posiciona entre las actrices más ricas de la industria. A lo largo de su carrera, ha sabido capitalizar su talento, belleza y ambición, construyendo un imperio que va más allá de la actuación.
Su carrera comenzó en la televisión mexicana a finales de los años 80, pero fue su mudanza a Estados Unidos en 1991 lo que marcó un punto de inflexión en su vida profesional. A pesar de los obstáculos que enfrentó, como la barrera del idioma y la falta de papeles para mujeres latinas, Salma Hayek no se dejó vencer. Desde sus primeras apariciones en programas como Dream On y The Sinbad Show, hasta su participación en Mi vida loca (1993) y Roadracers (1994), la actriz mexicana fue ganando terreno. Su gran oportunidad llegó con Desperado (1995), dirigida por Robert Rodríguez, donde compartió protagonismo con Antonio Banderas. Este papel no solo catapultó su carrera, sino que la colocó en el radar de los grandes estudios de Hollywood.
En 2002, Hayek dio un paso audaz y produjó Frida, la película biográfica sobre la pintora mexicana Frida Kahlo. Además de protagonizarla, también enfrentó desafíos personales y profesionales, como el acoso sexual por parte del productor Harvey Weinstein, quien intentó sabotear el proyecto. Sin embargo, Salma no solo logró completar la película, sino que también recibió una nominación al Óscar como mejor actriz, haciendo historia como la primera actriz mexicana en ser nominada en esa categoría.
La fortuna de Salma Hayek ha sido forjada a través de su exitosa carrera como actriz, productora y empresaria. A lo largo de los años, ha trabajado en numerosas películas de gran éxito y ha sido la cara de importantes marcas. Su colaboración con Avon y Revlon, así como su incursión en el mundo del modelaje con marcas como Mango, le han generado ingresos sustanciales. Además, Hayek ha expandido su imperio al fundar su propia productora, Ventana Rosa Productions, en 1998, que ha estado detrás de proyectos como Ugly Betty y la exitosa película Frida.
Más allá de la pantalla, Hayek ha lanzado varias empresas en el sector de la salud y la belleza, como Cooler Cleans y Blended Yourself, que ofrecen servicios de entrega de jugos y productos para el cuidado personal. Además, su línea de cosméticos Nuance ha sido bien recibida por el público. Todo esto ha contribuido enormemente a su riqueza, que ha sido aún más incrementada por su matrimonio con François-Henri Pinault, un multimillonario francés cuya fortuna es considerablemente mayor.
François-Henri Pinault, esposo de Salma Hayek desde 2009, es un empresario y magnate del lujo, cuyo patrimonio neto se estima en unos 7,000 millones de dólares. Como CEO de Kering, el conglomerado de marcas de lujo que incluye a firmas como Gucci, Saint Laurent y Balenciaga, Pinault ha expandido aún más el círculo de riqueza y poder que rodea a su esposa. Juntos, la pareja se ha convertido en uno de los duos más poderosos de la alta sociedad, combinando sus fortunas para disfrutar de una vida de lujo y opulencia.
El vínculo de Salma Hayek con François-Henri Pinault también se ve reflejado en su estilo de vida. La pareja se casó en una ceremonia en París en 2009, que fue seguida por varios eventos de renovación de votos en lugares exóticos como Venecia y Bora Bora. Durante la pandemia, la pareja aprovechó la tranquilidad de Grecia, donde se refugiaron varias veces para disfrutar de unas vacaciones de lujo. Además, Pinault ha sido un apoyo constante para su esposa en eventos de alfombra roja, donde ambos hacen una poderosa declaración de estilo y elegancia, usando marcas que representan su estatus.
Si bien Hayek no es la actriz más rica de Hollywood, su fortuna sigue siendo impresionante. Con un patrimonio neto estimado en 200 millones de dólares, se encuentra por debajo de otras figuras como Jennifer Lopez, cuyo patrimonio se calcula en 400 millones de dólares. Sin embargo, Salma sigue siendo una de las actrices más ricas de la industria, con un salario por película que generalmente oscila entre los 7 y 8 millones de dólares. Además, su participación en proyectos a largo plazo con Marvel Studios podría haberle generado aún mayores ingresos.
El éxito de Salma Hayek no solo se mide por su fortuna, sino por su capacidad para superar barreras en la industria y construir un legado que la ha consolidado como una figura clave en el cine y los negocios. Con el apoyo de su esposo, François-Henri Pinault, y su propia determinación, Salma ha logrado lo que muchos solo sueñan: una carrera exitosa y una vida llena de lujos y logros.