Humberto Zurita, el aclamado actor y director mexicano, ha sido un referente en la industria del entretenimiento durante más de cuatro décadas.
Reconocido por su talento, elegancia y profesionalismo en los reflectores, pocos conocen la historia de amor que marcó profundamente su vida: su relación con la inolvidable actriz argentina Christian Bach. Ahora, a sus 70 años, Humberto revela cómo este amor transformó su vida y dejó una huella imborrable en su corazón.
Inicios humildes y el salto a la fama
Nacido en Torreón, Coahuila, en una familia numerosa y unida, Humberto fue uno de diez hermanos. Aunque la actuación no era común en su entorno familiar, él y su hermano Gerardo decidieron aventurarse en la industria del entretenimiento.
Mientras Humberto conquistó los escenarios y la pantalla, Gerardo se convirtió en un exitoso productor de telenovelas. Juntos fundaron la productora ZUBA, un proyecto que no solo fortalecía su vínculo fraternal, sino que también redefinió el panorama televisivo mexicano.
El amor de Humberto por la actuación surgió en su adolescencia, cuando participó en una producción local de la ópera rock Tommy. Esta experiencia despertó en él una pasión por el teatro, motivándolo a mudarse a la Ciudad de México en 1976. Allí estudió en el Centro Universitario de Teatro, bajo la tutela del renombrado director Héctor Mendoza, quien lo ayudó a perfeccionar su talento.
Zurita pronto se destacó en obras teatrales de gran exigencia, como su interpretación en Rey Lear de Shakespeare, consolidándose como un actor versátil y apasionado. Sin embargo, fue la televisión la que lo llevó a la fama, especialmente con su papel de Alberto Limonta en El derecho de nacer (1981). Esta interpretación le ganó el corazón del público mexicano y latinoamericano.
Una historia de amor para la eternidad
En 1980, mientras trabajaba en la telenovela Soledad, Humberto conocía a Christian Bach, quien había llegado recientemente de Argentina. Antes de conocerla en persona, Humberto la vio en una revista y quedó impactado por su belleza. “Le mosté la revista a Ana Martín y le dije: ‘Mira lo que me trajeron’”, recuerda Zurita.
Su amistad nació en el set y, con el tiempo, evolucionó en un romance genuino. Aunque ambos tenían parejas en ese momento, su conexión era innegable. “Nos hicimos grandes amigos primero, pero yo sabía que ella era especial”, confiesa Zurita.
El primer beso entre ambos no fue un momento íntimo, sino una escena frente a las cámaras. Sin embargo, su relación fue creciendo hasta que, seis años después de conocerse, decidieron casarse el 3 de febrero de 1986 en la Iglesia de San Agustín, en Polanco. Su boda fue un acontecimiento mediático, con cientos de admiradores congregados en las afueras de la iglesia.
Juntos formaron una de las parejas más queridas del medio artístico, protagonizando exitosas producciones como De pura sangre y Encadenados. También compartieron aventuras familiares, como un viaje memorable a Asia cuando Christian estaba embarazada de su primer hijo, Sebastián. A lo largo de los años, tuvieron dos hijos: Sebastián y Emiliano, quienes también siguieron los pasos de sus padres en el mundo de la actuación.
Éxito en la producción y nuevos horizontes
En 1997, tomó la valiente decisión de dejar Televisa y unirse a TV Azteca con su productora ZUBA. Allí, produjo telenovelas innovadoras como El candidato y Azul Tequila, la única producción mexicana exportada al Reino Unido.
En el cine, Humberto también dejó su huella produciendo películas como Bésame en la boca, protagonizada por Paulina Rubio, demostrando su capacidad para narrar historias tanto en la televisión como en la gran pantalla.
La despedida de Christian Bach y un amor eterno
En 2017, en medio de especulaciones sobre la salud de Christian Bach, Humberto anunció que ambos se retirarían de la actuación para disfrutar de su familia. La noticia conmovió a sus seguidores, pues Christian era una figura muy querida en el medio.
Lamentablemente, en febrero de 2019, Christian Bach falleció a los 59 años debido a un paro respiratorio. Su partida dejó un vacío inmenso en la vida de Humberto y de sus hijos. Desde entonces, Humberto ha hablado con amor y respeto sobre su esposa, recordándola como su gran compañera y el amor de su vida. “Ella siempre estará conmigo, en cada paso que doy”, asegura con emoción.
Un legado imborrable
Hoy, Humberto Zurita sigue siendo un referente en el mundo del entretenimiento. Su trayectoria como actor, director y productor ha dejado una huella imborrable en la televisión y el cine mexicano. Pero, más allá de su carrera profesional, es su historia de amor con Christian Bach lo que continúa inspirando a sus seguidores. Un amor que comenzó en un set, creció con los años y que, a pesar de la adversidad, nunca dejó de brillar.
Humberto Zurita nos recuerda que, en la vida y en el amor, los momentos más sencillos son los que terminan siendo eternos.
