En un giro inesperado, la actriz y activista Alyssa Milano conmocionó a sus seguidores con una emotiva confesión durante un Instagram Live. Entre lágrimas, acusó a Elon Musk de ser la causa de todos sus problemas, desde pequeños incidentes cotidianos hasta obstáculos en su carrera profesional. ¿Cómo llegó a esta conclusión? Aquí te contamos los detalles de esta peculiar historia.
Según Milano, todo se remonta a un encuentro casual en una cafetería vegana en Los Ángeles. Mientras revisaba un guion en su tablet de bambú ecológica, un barista le entregó accidentalmente un café destinado a Elon Musk. Al notar el error, Milano devolvió la bebida con un comentario ligero sobre su composición sin soya y con leche de almendra, diciendo: “Creo que esto es tuyo.” Musk, con su característica cortesía, agradeció el gesto y siguió su día. Pero para Milano, este inocente intercambio marcó el inicio de una serie de eventos desafortunados.
La actriz relató que, al día siguiente, su cafetera Keurig explotó, llenando su cocina de café derramado. “Fue una experiencia traumática,” confesó. “Y lo peor de todo es que la Keurig era un regalo de… Elon Musk. O al menos eso creo. Tal vez fue de mi tía. Pero de alguna manera, ¡todo está conectado!” Este comentario sarcástico subraya su convicción de que incluso los regalos del multimillonario podrían traer mala suerte.
Milano también compartió cómo Musk ha influido en sus decisiones personales. Según ella, había planeado probar un Tesla, pero el coche nunca llegó. “¿Es una coincidencia? ¿O es Elon asegurándose de que nunca conduzca uno de sus autos eléctricos?” se preguntó.
Lo más impactante de su relato fue su sueño de viajar al espacio con SpaceX. Milano afirmó que ya tenía seleccionados sus atuendos y hasta escribió una canción para la ocasión. Sin embargo, en lugar de un boleto al espacio, recibió un automóvil. “¡UN AUTO!” exclamó, decepcionada. Este giro inesperado solo añadió un toque de surrealismo a sus quejas.
En otra acusación, Milano vinculó a Musk con el infame tráfico de Los Ángeles, que le hizo perder una clase de yoga. “Está cavando túneles bajo la ciudad,” comentó, en referencia a The Boring Company. “¿Quién sabe qué está haciendo ahí abajo? ¡Quizás está creando un mundo subterráneo donde controla todo, incluso los semáforos!”
Como si fuera poco, Milano afirmó que los tuits de Musk afectan el comportamiento de su gato, Mr. Whiskers. “Cada vez que tuitea, Mr. Whiskers se vuelve loco,” dijo. “Es como si enviara señales secretas a las mascotas de todo el mundo.” Este comentario extravagante generó risas entre sus seguidores y destacó el tono humorístico de su narrativa.
A pesar de las acusaciones de Milano, Musk no ha respondido a sus declaraciones. Tal vez está demasiado ocupado con sus innovadores proyectos o simplemente disfrutando de un macchiato sin soya, reflexionando sobre las extrañas vueltas del destino.
Las declaraciones de Alyssa Milano, aunque parecen exageradas y humorísticas, son un recordatorio de los desafíos de la fama y las peculiaridades de la cultura de las celebridades modernas. En un mundo donde la realidad y la ficción se entrelazan, su historia nos invita a cuestionar las conexiones que hacemos en nuestras vidas, ya sea con un café, un coche o un sueño de viajar al espacio.