El “Moonwalk” de Michael Jackson es sin duda uno de los movimientos de baile más icónicos de la historia, un momento definitorio en la cultura pop que sigue cautivando a los fanáticos e inspirando a los bailarines en todo el mundo. La primera vez que Jackson ejecutó el Moonwalk públicamente fue durante una actuación en 1983 de su éxito Billie Jean en el especial de televisión Motown 25: Yesterday, Today, Forever. Ese momento fue eléctrico, y cuando la audiencia estalló en aplausos, Jackson había dejado su marca para siempre en la mente de los amantes de la música.

Sin embargo, con los años ha surgido una pregunta persistente en la mente del público: ¿Michael Jackson robó el Moonwalk de Charlie Chaplin, el legendario actor y comediante conocido por sus movimientos únicos en la pantalla? Aunque Jackson nunca afirmó directamente que inventó el Moonwalk, esta cuestión ha generado debates entre historiadores, bailarines y fanáticos. La idea de que Jackson pudiera haber inspirado o tomado prestado el movimiento de Chaplin es intrigante, pero ¿cuál es la verdad detrás de esta conexión? Vamos a profundizar en la historia del Moonwalk, su desarrollo y cómo el legado de Charlie Chaplin pudo haber influido en el Rey del Pop.

El Nacimiento del Moonwalk: La Genialidad de Michael Jackson

La carrera de Michael Jackson como bailarín fue nada menos que revolucionaria. Desde joven, estaba obsesionado con dominar el arte del baile. Aunque Jackson se vio influenciado por varios artistas, incluidos James Brown, Fred Astaire e incluso los bailarines callejeros que encontraba, fue su capacidad única para combinar fluidez, precisión y teatralidad lo que lo distinguió de otros artistas. El Moonwalk, que parecía deslizarse sin esfuerzo sobre el suelo, no fue un movimiento que surgió de la nada. Jackson había estado practicando una serie de movimientos que combinaban elementos del “backslide”, un movimiento popularizado por los bailarines callejeros, y su propio toque personal.

Aunque Jackson es a menudo acreditado con la perfección del Moonwalk, es importante señalar que el movimiento en sí no era completamente nuevo. Antes de Jackson, otros artistas, incluidos bailarines callejeros e incluso algunas celebridades famosas, ya usaban variaciones de la técnica de deslizamiento. Sin embargo, fue Jackson quien le dio su toque característico y rítmico. Su actuación de Billie Jean durante el especial de Motown de 1983 fue el momento en que el Moonwalk pasó a estar irremediablemente asociado con él.

El Moonwalk y Charlie Chaplin: ¿Una Posible Conexión?

Charlie Chaplin, un maestro de la comedia física y el movimiento, fue un pionero en el uso de su cuerpo para contar historias, a menudo creando momentos memorables y cómicos con sus movimientos exagerados, pero precisos. Uno de los movimientos más famosos de Chaplin es su deslizamiento, que en algunos aspectos se asemeja al Moonwalk. Su icónico personaje del “vagabundo”, que apareció en películas como El Chico (1921) y Luces de la Ciudad (1931), era conocido por su estilo de caminar exagerado, que incorporaba una mezcla de deslizamientos, arrastres y pasos que llamaban la atención sobre la torpeza y el humor del personaje.

En particular, la habilidad de Chaplin para deslizarse y resbalar por la pantalla con movimientos exagerados, a menudo dando la impresión de que flotaba, guarda un sorprendente parecido con el suave movimiento deslizante que Michael Jackson popularizó. Aunque los movimientos de Chaplin eran a menudo cómicos y físicos, llevaban consigo una elegancia y precisión que muchos bailarines, incluido Jackson, posteriormente adoptaron.

Aunque es una idea interesante pensar que Jackson pudiera haber tomado el Moonwalk directamente de Chaplin, es más probable que tanto Jackson como Chaplin hayan recurrido a un mismo repertorio de expresión física que se basaba en principios similares. Ambos artistas fueron increíblemente meticulosos con los detalles de sus movimientos, cada uno con un sentido innato del ritmo, el control y el tiempo. La habilidad de Chaplin para exagerar el movimiento y crear una sensación de asombro y humor, sin duda, influyó en una generación de bailarines, incluido Jackson, que era conocido por usar cada parte de su cuerpo para expresar emoción.

La Influencia del Baile Callejero y la Cultura Pop

Mientras que la influencia de Charlie Chaplin pudo haber tenido un impacto indirecto en el estilo de baile de Jackson, es crucial reconocer las contribuciones de los bailarines callejeros y la cultura urbana en la evolución del Moonwalk. En las décadas de 1970 y 1980, varios estilos de baile callejero, como el locking, popping y breaking, estaban ganando popularidad en los Estados Unidos. Estos bailes involucraban una combinación de movimientos fluidos, acrobáticos e intrincados, algunos de los cuales guardan similitudes con el Moonwalk.

Bailarines de Los Ángeles y Nueva York, como Casper, quien era conocido por su “backslide”, y otros bailarines anónimos de la calle, ya estaban experimentando con movimientos que imitaban el efecto deslizante que Jackson perfeccionaría más tarde. Estos bailarines no intentaban imitar a Chaplin, sino que desarrollaban sus propias formas de autoexpresión a través del movimiento. Jackson, siempre en busca de ideas frescas e innovadoras, seguramente observó a estos bailarines callejeros, que fueron fundamentales en el nacimiento del Moonwalk.

Lo que distinguió a Jackson fue su capacidad para tomar estas influencias, incluidas las más suaves del estilo cómico de Chaplin, y convertirlas en algo universalmente reconocible e icónico. El Moonwalk de Jackson no solo fue un logro técnico, sino también una actuación de maestría, combinando precisión con el poder de la emoción. Elevó el movimiento, transformándolo en un símbolo de su propio genio creativo.

Conclusión: El Legado del Moonwalk y la Innovación de Michael Jackson

La pregunta de si Michael Jackson robó el Moonwalk de Charlie Chaplin es interesante, pero en última instancia simplifica demasiado la verdadera naturaleza de la innovación artística de Jackson. Si bien es plausible que el estilo cómico y físico de Chaplin haya influido indirectamente en Jackson, los orígenes del Moonwalk son más complejos. Es una combinación de diversas influencias, desde los bailarines callejeros hasta las artes escénicas, lo que culminó en la visión de Jackson.

Lo que está claro, sin embargo, es que la contribución de Michael Jackson al baile y la cultura pop no puede subestimarse. No solo adoptó o robó un movimiento; lo reinventó, convirtiéndolo en algo completamente nuevo. Como Jackson dijo en Billie Jean — “Not my lover” (No es mi amante), el Moonwalk no trataba de copiar a nadie, sino de crear algo completamente nuevo. Fue su visión, su estilo y su energía los que trajeron el movimiento a la vida, convirtiéndolo en uno de los símbolos más duraderos de su carrera. Con cada golpe de tambor y cada deslizamiento del Moonwalk, Jackson creó un legado que trascendió las fronteras de la música, el baile y la performance.